Los problemas de nuestra economía no tiene solución completa posible en el seno de la Unión Monetaria Europea si nos limitamos a aceptar las condiciones en que ésta está diseñada y las políticas que viene imponiendo.
La paradoja del panorama europeo es que mientras la izquierda se dice más europeísta que nadie, tiene menos presencia y menos coherencia supranacional que la derecha.
Las políticas puestas en práctica de forma unánime consideran el incremento de la desigualdad social como la condición para generar “la riqueza de las naciones”. La movilizaciónde los sindicatos enEspaña y lapropuesta de referéndumen Italia.